Barranqueando

Hasta ahora nos hemos dedicado a la escalada sobre todo, pero con la llegada de la primavera llega también la temporada de barrancos.

Los del Huerto, la cuadrilla de aventureros de Rincón, nos ha adoptado y se nos lleva de paseo para enseñarnos a barranquear.

Y en que consiste lo de hacer barrancos, pues es muy sencillo:

Te pones un traje de neopreno, que pareces una morcilla humana, y te metes en un río empiezas a bajar hasta que te encuentras una cascada de metros, se te ponen las pelotas de corbata y entonces bajas rappelando por la cascada mientras que cae encima todo el agua de los pirineos.

Esa es la teoría, la práctica es ir al monte a disfrutar, pasar un buen día, unas risas y un buen almuerzo.

Nos desplazamos hasta Aizpun, para hacer el cañón del Arteta o Artazul, almuerzo mañanero para empezar con fuerzas y al ataque.

Llegamos al sitio y fuimos a ver como iba de caudal el río, y sorpresa para los novatos cuando vemos una cascada de 50 metros y nos dicen que luego nos tenemos que tirar por allí, las pelotas de corbata.

Aunque no tengáis intención de hacer el barranco merece la pena visitar el nacedero del Arteta, y el circo donde terminan el Artazul con su casaca y el Licebar, y dar un paseo por esos bosques.

Y nos ponemos a la faena, preparativos, ponerse los neoprenos, repaso al material, Pinilla solo tienes que acordarte del ocho, y te lo has olvidado te voy a matar un dia de estos, todo listo al ataque.

Es una gozada ir con gente que sabe de que va la cosa y quien mejor que los del Huerto.

Muchas gracias Jurgen, Chinorris y Hector por aguantarnos, por sacarnos de casa y por las risas.

Como esta gente sabe hacer las cosas, pues un coche a la salida del barranco con la ropa seca para no pasar frio, y otro a la entrada para no pegarnos una hora de pateada. 

Y una vez dentro del barranco pues mejor que contaros nada dejo por ahí un video, y también me enrollo un rato que leer es bueno.

Bonito barranco, empieza con un rappel en una cascada preciosa, y luego muchos saltos, toboganes vericales, rappeles con agua y la salida con una cascada de 50 metros. Increible.

Si al barranco le sumas que es imposible parar de reirse con el grupillo que fuimos, para que quieres mas. Creo que termine con mas agujetas en la tripa de reirme que de las dos horas de descenso.

Y despues de dos horas de risas al coche y a cambiarnos de ropa.

Pinilla no me jodas que te has dejado las llaves del tu coche en el coche del Jurgen?????!!!!!!!

Pues como lo ois.

Pero no pasa nada porque tenemos soluciones para todo. Gracias a los briconsejos del Vaquilla es fácil abrir un coche con los cordones de las botas. Fácil no es, pero que te ries mucho al intentarlo os aseguro que si. Después de media hora lo conseguimos.

Nos llevaron a por las llaves y a comer, porque no hay nada mejor que una latilla de sardinas en el monte con amigos.

Y este es el relato de nuestro primer barranco "serio", a ver si hay suerte y podemos hacer muchos más.